Blog
La información y la prevención son claves en materia de salud. Aquí puedes ver algunas de las notas de nuestro equipo de profesionales


¿LA ENFERMEDAD DE CROHN SE PUEDE TRATAR POR MEDIO DE CIRUGIA?
Las enfermedades inflamatorias intestinales pueden, en algunas circunstancias, requerir de
tratamientos quirúrgicos como parte de su manejo. Históricamente, y sobre todo luego de
la aparición de los biológicos como alternativas de tratamiento, la posibilidad de cirugía fue
considerada como un recurso de «última instancia», generalmente frente a enfermedades
refractarias a todo tratamiento farmacológico y/o con alguna complicación.
Sin embargo, en los últimos años, varios estudios de investigación han demostrado que, en
personas con enfermedad de Crohn no complicada y con compromiso aislado a nivel del
íleon terminal (que es la porción final del intestino delgado, y la ubicación más
frecuentemente descripta de la enfermedad de Crohn a nivel del tubo digestivo), la cirugía
temprana es comparable en cuanto a la eficacia al tratamiento con biológicos – e incluso,
puede ser de gran utilidad con el fin de evitar la exposición crónica a medicaciones.
Varios estudios han demostrado que, en personas con enfermedad de Crohn de íleon
terminal y sin enfermedad complicada, la resección quirúrgica por vía laparoscópica en
forma programada, controla la enfermedad de manera eficaz, con menor riesgo de
exposición a mediano plazo a medicaciones biológicas por recaída respecto de personas con
enfermedad de Crohn que comienzan en forma temprana con tratamiento con biológicos.
Adicionalmente, el riesgo de complicaciones por la cirugía en estas circunstancias es, en
estos estudios, muy bajo; y cuando se estudia la calidad de vida en personas expuestas a
este tipo de procedimientos quirúrgicos, los resultados son muy alentadores.
La decisión de la cirugía como alternativa de tratamiento en personas con enfermedad de
Crohn de íleon terminal no complicada tiene que ser consensuada entre el paciente y un
equipo multidisciplinario que cuente con un cirujano experto en el manejo de
enfermedades inflamatorias intestinales, ya que esto aumenta las probabilidades de buenos
resultados.
Si querés conocer más acerca de la opción de tratamiento quirúrgico para las enfermedades
inflamatorias intestinales, no dudes en consultarnos!

¿QUE SON LOS TRATAMIENTOS BIOLOGICOS PARA LAS ENFERMEDADES INFLAMATORIAS INTESTINALES?
Una proporción de personas que padecen una enfermedad inflamatoria intestinal – ya sea
enfermedad de Crohn, colitis indeterminada o colitis ulcerosa – van a tener una severidad lo
suficientemente importante como para requerir de tratamientos con medicaciones
llamadas biológicos.
¿Por qué llevan este nombre? Los biológicos son anticuerpos monoclonales, que están
diseñados a través de técnicas de biología molecular (y basándose en el trabajo de un
científico argentino – César Milstein – que recibió por ello un premio Nobel en medicina) y
que tienen como fin bloquear el efecto de alguno de los elementos de la cascada de
inflamación que se activa en forma exagerada en estas personas y que es responsable de
ese daño que produce el sistema inmunológico en la pared del tubo digestivo. En ese
sentido, entonces, son medicaciones inmunomoduladoras.
Los biológicos han producido un impacto notorio en la historia natural de las enfermedades
inflamatorias intestinales: desde su incorporación como alternativas terapéuticas, se ha
logrado disminuir el riesgo de cirugías o de internaciones por reagudizaciones severas en
personas con enfermedad de Crohn, por ejemplo. Asimismo, el tratamiento con biológicos
ha logrado, en una proporción considerable de personas con estos trastornos, mejorar
considerablemente la calidad de vida.
¿Toda persona con enfermedades inflamatorias intestinales necesita recibir tratamiento con
biológicos? No, solamente aquellos que presentan una enfermedad que sea refractaria y/o
dependiente de corticoides para mantener la inflamación bajo control, o que tengan
actividad moderada a severa, o bien aquellos que, aún teniendo manifestaciones leves de
estas enfermedades, presentan una condición autoinmune asociada (por ejemplo, artritis
reumatoidea) que sí amerite tratamiento con este tipo de medicaciones.
¿Son tratamientos seguros? Desde su introducción hace más de dos décadas como
alternativas de tratamiento para las enfermedades inflamatorias intestinales, hemos
observado que el riesgo de efectos secundarios severos son relativamente bajos. Sin
embargo, como toda medicación, no están exentos de reacciones adversas. Como
disminuyen el impacto y/o efectividad de algunos elementos del sistema inmunológico, el
principal riesgo de su utilización es la posibilidad de adquirir infecciones: en particular,
algunas infecciones crónicas como la tuberculosis, hepatitis virales o el herpes zoster. Es por
ello que, antes de comenzar con este tipo de tratamientos, es conveniente realizar un
chequeo para descartar la presencia latente (es decir, asintomática) de este tipo de
infecciones crónicas y, eventualmente, tomar medidas para prevenirlas, como la vacunación
para la hepatitis b o la vacunación para el herpes zoster. Más alla de esto, cuando están bien
indicados, los beneficios que proveen superan de manera amplia a los potenciales riesgos
que puedan tener.
¿Se administran por vía oral? Como los biológicos son anticuerpos – que no son otra cosa
que proteínas – su estructura molecular es lo suficientemente grande como para que no
puedan ser absorbidos por nuestro intestino si uno llegara a tomarlos por vía oral. Por este
motivo, los biológicos que hasta ahora se utilizan se administran por vía subcutánea y/o
endovenosa. Como tienen un efecto de duración en el organismo relativamente largo, la
frecuencia con la que se administran es variable, pero suele comprender intervalos que van
entre las dos semanas a las doce semanas.
Si querés saber más acerca de este tipo de tratamientos y si te beneficiarían, no dudes en
consultarnos!

La Importancia de un Enfoque Multidisciplinario en el Tratamiento de Enfermedades Inflamatorias.
En el mundo de la medicina, abordar enfermedades inflamatorias con un equipo de profesionales de la salud es esencial para proporcionar la atención más efectiva y completa posible. ¿Por qué? Existen razones fundamentales que respaldan esta aproximación colaborativa.
Primero y ante todo, las enfermedades inflamatorias suelen ser complejas y multifacéticas. Tomemos, por ejemplo, las enfermedades inflamatorias intestinales como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Estas condiciones afectan no solo al sistema gastrointestinal, sino que también pueden tener implicaciones en áreas como la nutrición, el bienestar emocional y la calidad de vida en general. Abordar todos estos aspectos de manera adecuada requiere una amplia gama de conocimientos y habilidades, que generalmente no están presentes en un solo profesional.
Un equipo multidisciplinario reúne expertos de diversas especialidades, desde gastroenterólogos, coloproctólogos y nutricionistas hasta psicólogos. Esta diversidad de conocimientos permite un enfoque integral que atiende cada aspecto de la condición del paciente. Cada profesional contribuye con su experiencia única, asegurando que el tratamiento sea personalizado y completo.
Un beneficio adicional de este enfoque es la comunicación fluida entre los miembros del equipo. Al estar físicamente presentes en el mismo espacio, se promueve una colaboración estrecha y se facilita el intercambio de información relevante sobre el paciente. Esto contrasta con la práctica más tradicional, donde el paciente se convierte en el intermediario, transmitiendo información entre diferentes profesionales en sucesivas derivaciones. Esta cadena de comunicación puede ser propensa a malentendidos o pérdida de detalles críticos, lo cual puede resultar en decisiones de tratamiento menos informadas.
Al contar con un equipo de profesionales trabajando juntos, la atención se vuelve más cohesiva y coordinada. Cada miembro tiene una comprensión completa del caso y puede contribuir a la formulación de un plan de tratamiento completo y personalizado. Además, este enfoque reduce significativamente el riesgo de errores o malinterpretaciones que pueden surgir cuando la información se pasa de un profesional a otro.
El abordaje de enfermedades inflamatorias mediante un equipo de profesionales de la salud es fundamental para proporcionar el más alto nivel de atención. La complejidad de estas condiciones exige una perspectiva multidisciplinaria que integre diferentes áreas de especialización. Al trabajar juntos en un entorno colaborativo, los profesionales de la salud pueden proporcionar un cuidado integral que tiene en cuenta todos los aspectos del bienestar del paciente. Esto no solo mejora los resultados del tratamiento, sino que también ofrece una mayor tranquilidad tanto para el paciente como para sus seres queridos.
Equipo completo de
CETIE, enfermedades Inflamatorias

¿EXISTE UN RIESGO AUMENTADO DE TENER CÁNCER DE COLON SI TENGO UNA ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL?
Con el correr de los años de evolución de este tipo de enfermedades, sobre todo cuando hay afectación difusa e intensa del intestino grueso, algunos pacientes pueden tener un riesgo más elevado de desarrollar lesiones que pueden predisponer al cáncer de colon. Existen algunos factores de riesgo, como la coexistencia de otras enfermedades autoinmunes como la colangitis esclerosante primaria, pero el principal factor de riesgo para el potencial desarrollo de cáncer de colon en estos pacientes es la falta de control adecuado de la actividad inflamatoria a nivel del colon.
En una época en la que los tratamientos no eran muy efectivos, esta complicación era más frecuentemente observada. Sin embargo, en la medida en que conseguimos que esa actividad descontrolada del sistema inmunológico sea mínima o nula, el riesgo de desarrollar cáncer de colon disminuye. De hecho, en las últimas décadas la cantidad de casos nuevos por año de cáncer de colon en personas con enfermedades inflamatorias intestinales ha ido disminuyendo.
Más allá de esta observación, es de vital importancia la prevención. En personas con diagnóstico de enfermedades inflamatorias intestinales que afecten al colon, luego de unos años de evolución de la enfermedad, es necesario comenzar a realizar estudios de pesquisa de lesiones preneoplásicas (es decir, que pueden favorecer el desarrollo de cáncer) mediante colonoscopía. Esto debería hacerse en este grupo de pacientes, incluso en los casos en los que no hay evidencia de síntomas.
Este es uno de los motivos por lo que es de suma importancia realizar chequeos regulares con un médico si uno presenta diagnóstico de enfermedad inflamatoria intestinal.
Dr Juan Sebastián Lasa miembro de
CETIE, enfermedades Inflamatorias

¿A QUÉ LLAMAMOS ENFERMEDADES INFLAMATORIAS INTESTINALES?
Las enfermedades inflamatorias intestinales son un conjunto de patologías que afectan el tubo digestivo que tienen en común las siguientes características:
1) son de causa desconocida;
2) pueden afectar tanto a varones como a mujeres, presentándose más frecuentemente en la segunda o tercera década de la vida;
3) son de mecanismo inmunológico, es decir, nuestro propio sistema inmune provoca una respuesta inadecuada en el tubo digestivo que lleva al desarrollo de las patologías;
4) producto de esta respuesta inmunológica, se producen lesiones visibles por imágenes o endoscopia que suelen consistir más frecuentemente en úlceras de tamaño y número variable.
Las dos patologías más frecuentes dentro de este grupo de enfermedades son la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. Si bien muchas veces terminan tratándose de manera similar, hay algunas diferencias en cuanto a su comportamiento que hace que los tratamientos de una y otra puedan ser diferentes.
Por ejemplo, la enfermedad de Crohn puede afectar a cualquier segmento del tubo digestivo, desde la boca hasta el conducto anal; mientras que la colitis ulcerosa, solo afecta al intestino grueso (colon). El objetivo del tratamiento en estas patologías es lograr que el paciente no presente síntomas, pero que tampoco persista con actividad inflamatoria subclínica (es decir, que no genere síntomas) y que aumente el riesgo de complicaciones a largo plazo, como riesgo de recaídas sintomáticas, o de desarrollo de tumores o, en el caso de la enfermedad de Crohn, desarrollo de estenosis (obstrucciones) o de fístulas.
El tratamiento consiste en el abordaje desde muchas disciplinas: desde la parte clínica, el aspecto nutricional, hasta el tratamiento quirúrgico – que, hecho en forma y tiempo oportunos, tiene muy buenos resultados. Es por eso que es de suma importancia el manejo con un equipo multidisciplinario con experiencia en el manejo de estas enfermedades.
Dr Juan Sebastián Lasa miembro de
CETIE, enfermedades Inflamatorias